domingo, 25 de abril de 2010

Vínculo o relación (III - La actitud)


Llegamos entonces al meollo de lo que estoy intentando acotar desde hace unos días en esta trilogía: excluyendo la rutina, que es un elemento disgregador de cualquier relación o vínculo; pero admitiendo su posible existencia, ya que es el único modo de afrontarla y superarla en su caso, mediante la decidida voluntad de seguir en el camino emprendido.

Admitiendo también que pueda existir la convivencia; pero sin que eso suponga que sea necesaria en absoluto para la existencia de un vínculo que prevalezca sobre una hipotética relación; sino que es preciso seguir buscando un “más allá” que nos lleve a algo completamente distinto de la mera relación y que de existir esta, ayude a trascenderla buscando el vínculo fuerte que deseamos.

Entonces, como ya he adelantado, la actitud de quien se entrega, es la verdadera clave de lo que estamos buscando, y no desconfiemos porque a veces las palabras parezcan decir algo sin decirlo, cuando se toma solo su forma, o porque otras veces diciendo lo que dicen parezcan decir otra cosa …: ahora justamente DICEN lo que queremos que digan, vayamos al fondo de lo que estamos diciendo: la actitud de sumisión de quien se entrega (o de esclavitud en su caso) es realmente la clave de si nos encontramos ante un vínculo AMO-sumisa o una relación hombre-mujer.

Hago aquí un inciso, para decir que no presupongo en absoluto que sea el género varón-masculino-Dominante como opuesto al hembra-femenina-sumisa, el que deba tenerse en cuenta. Simplemente, al hablar de mis propias reflexiones en base a mi concreta experiencia actual, para establecer un marco para esa misma reflexión, me baso en lo que conozco y vivo: la presencia de una sumisa (futura esclava) a mis pies y su devenir.

También vuelvo a decir, como en los otros dos aspectos comentados anteriormente, que la variedad de situaciones es enorme y no prejuzgo ninguna, ni me refiero a ninguna en especial, aunque esté hablando de relaciones, o de situaciones que parezcan una relación; sino que justamente estoy buscando definir el “cemento” que posibilita que lo que tenemos sea justamente ese vínculo de Dominación/sumisión y no otra cosa (relación, encuentro, coincidencia, sesiones repetidas, etc.) que usen los elementos de la Dominación/sumisión pero no sean ni permanentes ni busquen su continuidad y exclusividad.

En eso me centro justamente en lo que hace que ese vínculo sea lo fundamental entre tal Dominante y tal sumisa, aún en el caso de que coincida con otra situación, por convivir ambos, por existir otras relaciones sentimentales, por existir también otros vínculos de Dominación/sumisión con terceros, por lo que sea, sean estos más potentes como vínculos o como relación: ninguna de esas situaciones es excluyente para lo que buscamos y queremos decir. Y por supuesto que en esta exposición no excluimos las relaciones-vínculos plurales coincidentes; más aún, en el fondo estamos estableciendo un marco en el que precisamente el verdadero vínculo es absolutamente independiente de la consideración de pareja, no ya de relación; por mucho que no excluyamos la existencia también (pero no por exclusión de ninguna otra) de una relación entre ambos.

Así pues terminaríamos esta exposición dejando claro que lo que hace que exista un vinculo Amo-sumisa no es ninguna situación sentimental, ni de pareja, esporádica o definitiva, y que esas situaciones lo mismo pueden ayudar que distraer del objetivo o búsqueda En definitiva ni son complementarias, ni incompatibles, y por supuesto pueden existir diversas gradaciones en la entrega-compromiso-juego que incluso excluyan la entrega como tal y dejen el hipotético vínculo por debajo de la relación paritaria de la pareja, en la que el “rol”, se entienda aquí como un “papel” y sea algo aparte de la vivencia concreta elegida. Aun en el supuesto de que la elección de este modo de interacción sea lo que ha unido a esa pareja para iniciar una relación.

Por el contrario, toda la reflexión que hago se está basando precisamente en el hecho de que lo que se ha elegido desde el principio y se ha buscado, es esa entrega que hace que la sumisa se ponga incondicionalmente a los pies del Amo, y entonces lo accidental no es el rol, sino que ese es la esencia, y la forma que adopte la convivencia, cohabitación o incluso encierro (en la “mazmorra”) puede ser cualquiera siempre que la actitud de quien se entrega, así como la del que recibe esa entrega, estén meridianamente claras desde el principio y sea lo demás lo que es accidental.

Tampoco olvidemos que como personas somos iguales y que la elección de esa actitud se hace precisamente desde la libertad; con ello es obvio que no forzamos las cosas cuando externamente se da una imagen más convencional de relación, e incluso existiendo una sumisión, esa no es incompatible con la existencia de una vida basada en la igualdad de ambos en sus relaciones con los demás. No dejemos de tener en cuenta que esa imagen, e incluso convivencia, no son incompatibles si somos conscientes de que la elección sincera de esa actitud de sumisión, casa mal con cualquier consideración paritaria con el Amo, y actuamos de acuerdo con ello.



En definitiva toda esa reflexión me lleva a un único punto: ¿Quién Domina? Y por supuesto ¿Quién se entrega?... Y ser consecuentes con ello. Si no estamos jugando, sino eligiendo un estilo de vida, tendremos que ser consecuentes y tener la ACTITUD de sumisión en un caso y de Dominación en el otro, acorde con lo que buscamos.

En cambio si solamente buscamos utilizar el BDSM por lo que nos aporta, cualquier situación vale y cualquier técnica o escenificación pueden servir a nuestro propósito. Aquí no hablamos de ello, aunque por supuesto que esa otra actitud también es válida.

Aquí solo he querido hablar de que quien verdaderamente se entrega y verdaderamente se somete al Amo, con su actitud deja claro que existe un vínculo que prevalece sobre la hipotética relación de existir esa. Porque en definitiva, las relaciones son sobre todo paritarias, pero el vínculo se basa en la desigualdad: uno Domina, el otro, sencillamente, se somete: es así y así lo hemos elegido, desde la libertad.



AMOSUM


Fotografías propias

2 comentarios:

Hermosa sumisa dijo...

Muy buena exposición
fedra y Moro

AMOSUM dijo...

Gracias a ambos, Moro y fedra.

AMOSUM


Espero que te aporte algo esta página, expresión de búsquedas y encuentros. Lugar para dejar pequeñas cosas e ideas que se me ocurren. Lugar también donde mi sumisa, futura esclava, deja sus palabras... También tu puedes enriquecerla con tus comentarios.

Porque, aunque no pretendo nada expresamente; no es menos cierto que muchos tenemos la esperanza de que nuestro particular camino, nuestra particular "estela en la mar" sirva a otros, y para mí sería muy grato que asi ocurriera.

Y os invito a todos a recorrer nuestro propio camino DESPACIO pero con SEGURIDAD y FIRMEZA, como las olas del mar, que aunque aparentemente "blandas", son capaces de transformar y allanar sus propias playas. Como esas estelas que, aunque parecen desaparecer, siguen dejando su impronta y su huella indeleble.

Saludos a TODOS.

AMOSUM

ENLACES DIRECTOS A ARTÍCULOS

A continuación voy a dejar enlaces directos a artículos que me han llamado la atención y que pienso que es mejor leerlos en su propia página-contexto, con lo que además evitamos la colisión con los derechos de autor. Mejor que hacer un artículo que sería un plagio, es enlazar con lo que otros ya dicen.

http://bondage.kshara.com/

Con mordazas

Con mordazas (2)

Con mordazas (3)